Celaya, Gto a martes 11 de febrero del 2025. (Alan Ordaz).- El presidente municipal de Celaya reconoció que cometió un error al contratar al consultor español César Castresana González para elaborar el programa de gobierno 2024-2027.
A pesar de que el contrato establecía la entrega del documento, este fue entregado incompleto y con múltiples deficiencias, lo que generó polémica entre los integrantes del ayuntamiento.
El contrato estipulaba un pago de 675 mil pesos, pese a que el consultor solo debía entregar el 85% del documento final.
“Puso el contrato, entre comillas, como él quiso. Él nos entregó, según él, el proyecto cuando no estaba, vamos a decir así, al 100%. Estaba al 80, 85%”, declaró el alcalde al respecto.
La falta de precisión en el contrato permitió que Castresana González limitara su y excusara su responsabilidad en la entrega del programa.
“No se le puede demandar por incumplimiento porque él, como todo vivo, en el contrato sí puso hasta dónde iba a llegar. Y en el contrato dice que le va a entregar el 85% de las cosas”, explicó el funcionario municipal.
La revisión del documento evidenció errores significativos, incluyendo faltas de ortografía y omisiones en los ejes de trabajo. Sin embargo, el presidente justificó que se trabajó apresuradamente para corregirlo antes de presentarlo al pleno.
“Aún así nosotros tuvimos tiempo y, por ejes, el sábado, los directores y equipos de los directores trabajamos por ejes horas y horas y lo acomodamos”, señaló.
El ayuntamiento tampoco tuvo acceso al documento antes de su revisión, lo que generó inconformidad entre los regidores.
“Los de Morena, tú dime quién no lo conoce. Bueno, a lo mejor no les quieren dar información, etcétera, pero es su derecho también”, expresó cuando se le cuestionó sobre la falta de conocimiento del programa.
Además de las deficiencias en el contenido, la administración municipal también enfrentó dificultades con los plazos legales.
Según la normativa, el programa de gobierno debía aprobarse en los primeros cuatro meses de gestión, es decir, antes del 10 de febrero. Sin embargo, será hasta el 19 de febrero cuando se someta al pleno.
El retraso en la aprobación fue atribuido a ajustes de última hora y a la necesidad de cumplir con el proceso de validación ante el Instituto de Planeación.
“Ellos nos dicen que nos entregan, ellos nos retrasaron, nosotros no nos retrasamos. Ellos nos retrasaron, ellos nos lo van a entregar el miércoles, ese fue el convenio”, afirmó el alcalde al justificar el retraso.
El presidente municipal admitió que la falta de supervisión en la elaboración del programa permitió que el consultor modificara los términos del contrato a su conveniencia.
“Yo me equivoqué en no verificar qué es lo que me iba a hacer. Yo creí que lo que yo le pedía, él lo entendió”, reconoció.
A pesar de los problemas, aseguró que se hicieron las modificaciones necesarias para entregar un documento funcional.
No obstante, el proceso quedó marcado por la improvisación y las irregularidades en su contratación, lo que podría afectar la implementación del plan de gobierno en los próximos años.