Beber dos cervezas diarias (una botella equivale a 500 mililitros) puede reducir los niveles de dolor en casi una cuarta parte del cuerpo, tal como un analgésico, de acuerdo con un estudio dirigido por la Universidad de Greenwich, en Inglaterra.
¿Será?
El estudio, publicado en el Journal of Pain, reveló que aumentar el alcohol en nuestra sangre (con dos cervezas de 500 mililitros) hace que nuestro umbral del dolor sea mayor.
“El consumo de alrededor de cuatro unidades de alcohol, cerca de dos cervezas, resulta en una caída de 24% en las calificaciones de dolor en las personas”, dijo el responsable de la investigación, Drever Thompson.
Esto se comprobó gracias a que diferentes investigadores compararon 18 experimentos controlados, en los que participaron cerca de 400 personas, que fueron expuestas a diferentes tipos de dolor inducido y el resultado fue favorable para la disminución del dolor con nuestra querida cerveza.
Si bien no está claro como el alcohol ayuda a reducir el dolor, se puede pensar que actúa en los mismos receptores nerviosos que los medicamentos, como el ibuprofeno o la ketamina, entre otros.
Thompson dijo que la cantidad de consumo de alcohol no debe excederse porque si se hace, el efecto podría ser negativo y causar que el dolor que se tenía antes de beber, se alargue.
El gobierno de Reino Unido, cree que el consumo de alcohol de bajo riesgo indica un consumo máximo de 6 cervezas o vasos.
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