Celaya, Gto a jueves 17 de octubre del 2024. (Alan Ordaz).- El presidente municipal de Celaya, Juan Miguel Ramírez Sánchez, manifestó una postura firme y de “no tolerancia” respecto a los malos olores que afectan a la zona norponiente de la ciudad.
Esta problemática, que ha persistido durante años, será abordada con acciones contundentes en su administración, sin justificaciones hacia las empresas contaminantes.
Ramírez Sánchez expresó que ya se han iniciado negociaciones con varias empresas.
“Estuvimos en Bachoco, que es una de las señaladas, y vimos sus procesos. Aunque los olores no son tan fuertes, continuaremos vigilando que cumplan con las medidas necesarias”, afirmó.
Sin embargo, señaló que no solo es responsabilidad de Bachoco, sino de varias industrias que deben ser supervisadas.
Durante un recorrido por las instalaciones de la empresa, el alcalde aseguró haber comprobado el uso de maquinaria avanzada para tratar los desechos.
“Nos mostraron cómo procesan las plumas, la sangre y las vísceras, y cómo las cenizas se manejan con una tecnología que cuesta millones de pesos. Sin embargo, esto no es suficiente si los olores continúan afectando a la población”, añadió.
Ramírez Sánchez subrayó la importancia de las inversiones realizadas por estas empresas, pero advirtió que no permitirán que dichas inversiones dañen la salud pública.
“Podemos tener inversiones multimillonarias, pero si afectan a los ciudadanos, no tienen cabida aquí. La salud de la población es nuestra prioridad”, declaró.
El alcalde fue claro en su postura respecto a las acciones del gobierno anterior, que a menudo justificaba la falta de medidas.
“En mi administración no habrá justificaciones. Sabemos que el aire y la ubicación de las empresas contribuyen a los problemas, pero vamos a investigar quiénes han fallado en su responsabilidad de inspeccionar correctamente”, enfatizó.
Ante la magnitud del problema, Ramírez Sánchez anunció que se implementarán políticas públicas más estrictas en materia medioambiental.
“Vamos a ser contundentes en la aplicación de las normativas. Las direcciones correspondientes realizarán una revisión exhaustiva para detectar las empresas responsables de los malos olores”, sostuvo.
El presidente también destacó que el problema de los olores no solo es un tema de calidad de vida, sino también de salud pública.
“Los hospitales públicos están siendo afectados indirectamente, pues al no controlar la contaminación, estamos generando más pacientes con problemas respiratorios”, dijo.
En conclusión, Ramírez Sánchez aseguró que su administración será implacable en la lucha contra las empresas contaminantes.
“No habrá margen para la negligencia. Vamos a tomar acciones inmediatas y efectivas para que los olores desaparezcan de Celaya”, sentenció.
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