Después de 12 días seguidos superando los 42 grados centígrados, la comunidad de Santa Teresa en la región de Australia Central despertó con unas tremendas imágenes que ya le están dando la vuelta al mundo. Este miércoles, debido a las extremas condiciones climatológicas, los habitantes encontraron cerca de cuarenta caballos salvajes muertos alrededor de lo que había sido un pozo de agua natural.
Ralph Turner, un policía del lugar, le dijo a ABC que se encontró con los animales mientras respondía a una emergencia relacionada con la escasez de agua en la región. “Así encontramos a los pobres caballos”, contaba Turner. “Hemos tenido día tras día de calor, sin parar”.
“No podía creer que algo así pudiera suceder, es la primera vez que pasa de esta forma”, contaba el policía al hacer públicas las fotografías que tomó.
Otros 50 caballos fueron encontrados en muy mal estado de salud pero ya fueron trasladados y atendidos por las autoridades de las comunidades aledañas. La onda de calor reciente ha secado todas las fuentes de agua que tenían los animales salvajes de la zona. Mientras tanto, los locales ya se reunieron para decidir qué hacer con los cadáveres.
Con menos de 600 habitantes en un terreno de más de mil 200 kilómetros cuadrados —y a casi 1 hora de la “ciudad” más cercana— , la comunidad de Santa Teresa es la definición de remoto ubicada en medio del desierto en el denominado Centro Rojo. Al igual que el resto de Australia, la onda de calor en la región está a todo lo que da y, después de 12 días de estar cocinándose, la cosa no se le ve un pronto final: se espera que hoy lleguen a los 42 grados y que mañana que superen los 43 ºC.
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